05-12-2019
Para Fernando Díaz Offeney, al sector pecuario le hace falta más innovación. Este licenciado en Administración de Empresas es socio en Digirodeo, la startup que resultó ganadora del certamen Agtech Ganadero 2019 en la categoría de "Emprendimientos en marcha y Escalamiento". La innovación premiada fue una pistola vacunadora que permite registrar las aplicaciones realizadas al rodeo y saber exactamente cuántos animales se trataron. De fácil uso, la herramienta se complementa con una app y una plataforma tecnológica que permiten una "digitalización de la trazabilidad sanitaria del ganado o de rodeos, con el fin de mejorar la calidad de la carne argentina". ¿Cómo y cuándo nació Digirodeo? Digirodeo nació hace tres años durante una charla entre amigos a la búsqueda de oportunidades. La empresa se compone de tres socios: uno es Ingeniero en Producción Agropecuaria y los otros dos somos licenciados en Administración de Empresas. Queríamos juntar la tecnología con la ganadería, ver de qué manera hacerle el trabajo más simple al productor. Y ahí empezaron a cranear.... Sí, en realidad primero se juntaron Nicolás e Ignacio. Habían creado una jeringa que funcionaba como un contador simple para medir la cantidad de aplicaciones de determinada vacuna. Pero querían crear una herramienta que brindara más información. Entonces Nicolás me convocó y empezamos a pensar en generar información en la manga. Me fui empapando del tema, recolectando información del campo, de la industria agropecuaria y empezamos a desarrollar nuestra solución, que se terminó convirtiendo en una jeringa inteligente que hace trazabilidad sanitaria. Hoy estamos totalmente enfocados en el mundo de la ganadería. La ganadería de precisión en particular, y la trazabilidad, son nuestro leitmotiv. ¿En qué consiste exactamente la herramienta? Nuestra jeringa inteligente tiene un complejo sistema de gestión de datos por detrás que le hace la vida mucho más fácil al productor: permite un registro correcto, seguro y exacto de todo el accionar que se les hace sanitariamente a los animales. Es resistente a los rayos UV e intuitiva al manejo, con un diseño cómodo para el vacunador. Viene con una memoria interna de 2 GB. ¿Se requiere alguna capacitación especial para usar la jeringa? No, la jeringa tiene un teclado simple e intuitivo para que pueda usarlo cualquier empleado del campo. Está diseñada para que una persona que utiliza una herramienta como el WhatsApp, por ejemplo, la pueda manejar sin ningún problema. Queremos que los productores pierdan el miedo y entiendan cómo esta tecnología puede ayudarlos a obtener mejores rindes y perfeccionar la trazabilidad, a demostrar que el trabajo sanitario realizado es el adecuado. ¿Cómo funciona el aparato? La jeringa control 1.0 registra cada tratamiento que se le hace a los animales, realiza trazabilidad a nivel lote. Así, a la hora de vender la hacienda, el productor tiene certificado absolutamente todo lo que le hizo, y esto es un valor agregado para su comprador. El funcionamiento de la jeringa es simple: primero le decimos qué tipo de tratamiento estamos haciendo, a qué animal y aplicamos el producto. Luego el encargado de la hacienda firma con el dedo en la pantalla del celular haciéndose responsable de todo el tratamiento. Una vez que finalizado, la jeringa se conecta con nuestra app móvil mediante blue tooth de baja energía; y ahí dentro de la app se termina de conformar el acta de vacunación. Este documento cuenta con las coordenadas exactas del lugar adonde se realizó la vacunación, la hora, todos los datos del productor y del establecimiento. Además, un detalle del antiparasitario que se aplicó, a qué lote, y en qué cantidad; su marca, serie y vencimiento. El acta de vacunación se envía por e-mail y llega en formato PDF. El archivo es inalterable, tiene un código de validación que lo hace único, y permite hacer un seguimiento si luego algo anduvo mal. ¿La herramienta brinda mayor control entonces? Sí, a través de la jeringa se puede controlar mejor al vacunador porque permite conocer todos los aspectos externos que influyeron en el medicamento tales como: la hora de inicio del tratamiento, el tiempo entre cada aplicación, las equivocaciones, la temperatura y la humedad al momento de la aplicación, si llovía o si la hacienda estaba estresada. ¿Qué beneficios conlleva utilizar este formato digital? En base a las actas que utiliza el SENASA, creamos el concepto de "actas digitales", con toda la información prolijamente plasmada. A la hora de hacer análisis, resulta mucho más fácil tenerlo en un formato digital, con la firma incluida. Además, cuando se realizan manualmente hay mucho margen de error humano, porque uno se lleva un papel que transcribe. También está el tema del tiempo, porque quizás el vacunador que toma los datos recién vuelve a la oficina para transcribir los papeles después de una semana de realizado el tratamiento. Entonces tratamos de reducir la posibilidad de error y este tiempo. De esta manera, se hace la aplicación y, si no hay señal en el campo, los datos se cargan solos cuando uno agarra la ruta y recobra la señal, o llega a la casa. Si hay buena señal el proceso se realiza en tiempo real y el informe queda listo. Se puede chequear todo lo que se le hizo al animal, qué medicamento se aplicó y hacer posteriormente un seguimiento. ¿O sea que todo queda en el acta digital? En realidad la información no queda solamente ahí, sino que se luego sube a nuestro Data Center. Si el productor tiene un sistema de gestión ganadera lo puede integrar con nuestra solución y tomar los datos de ahí mediante una app o un web service. De esa manera, lo puede transformar en información para una mejor toma de decisiones. ¿Todo eso figura en el acta digital? Claro, el acta tiene la fecha de tratamiento y, hace poco le sumamos el fin del tratamiento. Ahora permite calcular el período de carencia, y saber cuándo se puede mandar el animal a faena. ¿Qué función cumple la app? La jeringa es la herramienta que certifica lo que estás haciendo y la app su complemento. Se conectan vía bluetooth. En la app uno carga por única vez a los diferentes productores con sus datos, luego toda la información aparece ahí. La jeringa carga lo que se hizo y la app se encarga del resto. ¿Se pagan por separado la jeringa y la app? Hoy solo estamos monetizando la jeringa, el software es gratuito, se descarga sin costo. En realidad hay tres patas: la herramienta, que es la jeringa; luego la aplicación que vincula a la jeringa con el software; y finalmente, la plataforma, adonde se puede ver la performance de cada una de las pistolas. Desde la plataforma se puede administrar usuarios, ver qué cantidad de jeringas se tiene y a quiénes se las asignará, en caso de una organización. Las herramientas son independientes pero dependen una de la otra. Lo importante es que la información siempre está. Si uno pierde el celularm por ejemplom lo tiene igual. ¿Quiénes consumen la herramienta? Nuestros principales clientes son los productores, pero también los entes de vacunación y los veterinarios. Finalmente, algunos laboratorios y frigoríficos también. Nosotros buscamos que los entes de vacunación adopten la herramienta, porque los puede ayudar muchísimo en la captura de datos y llenado de las actas de vacunación. ¿Cómo se comercializan los productos? ¿Ya exportan? Hoy en la Argentina se venden por e-commerce. Estamos avanzando con algunos representantes en Brasil y también visitando frigoríficos en Bolivia, Paraguay y Uruguay. Nos encontramos en un "proceso de evangelización", con la idea de regionalizarnos. Pero cada país tiene sus reglas, hay muchos datos que son propios de Argentina. En Bolivia, por ejemplo, a las categorías de vaca y vaquillona se les llama macho y hembra. También el idioma es distinto en el caso de Brasil. ¿Cómo dan a conocer el producto localmente? ¿Tienen buena recepción? Como toda innovación, lleva un tiempo presentarla y mostrarle al productor sus beneficios. Asistimos a muchas charlas o presentaciones del sector agropecuario, como las CREA por ejemplo, y ahí damos a conocer lo que hacemos. Si bien la recepción es buena, todavía no hay tanta adopción, porque cuesta dar el primer paso. Estamos buscando que la tecnología base se vaya adoptando. Una vez que esto ocurra comenzaremos a evolucionar hacia tecnologías más complejas, sobre todo profundizando en este concepto de trazabilidad. Para nosotros es muy importante expandir el negocio, porque además necesitamos feedback sobre qué mejoras hacer. ¿Cuánto tiempo les llevó desarrollar la herramienta? ¿Cómo evolucionó de sus inicios a la actualidad? Desde que arrancamos hasta que sacamos el primer producto tardamos un año y medio. Y el desarrollo de la app se hizo en paralelo. Pero en realidad el desarrollo nunca termina, siempre estamos agregando cosas. Por ejemplo, en la etapa inicial, si uno hacía mucha fuerza se nos rompían los gatillos, y tuvimos que rediseñarlos. ¿Ofrecen algún otro servicio? ¿Cuáles son los proyectos en el corto-mediano plazo? Estamos realizando análisis sobre la plataforma para ofrecer servicios de big data. Gracias a nuestra herramienta es posible realizar diferentes cruces de información. Además estamos tejiendo alianzas muy importantes para ofrecer un servicio más completo, sobre todo apuntando al bienestar animal y al buen manejo ganadero. Toda esta información "trazada". ¿Qué premios han recibido? ¿Qué sensación les provoca el reconocimiento? ¡Todos los reconocimientos son muy bienvenidos! Los premios nos sirven para tener mayor difusión y constituyen un apoyo emocional importante. Ver que nuestro trabajo es reconocido y que genera impacto en la industria nos impulsa a seguir trabajando, nos lleva a querer evolucionar. Además creemos que se necesita más innovación en el sector pecuario, ya que en el agro hay más herramientas creativas. Hemos recibido premios como Cita 2017, Innovar 2018- donde ganamos con otra jeringa que se lanzará el año que-, este año ganamos en La Rural el Agtech Ganadero y también fuimos mencionados en Innovar 2019, por otro producto nuevo que también está relacionado a la trazabilidad. ¿La trazabilidad constituye hoy un requisito ineludible? ¡Sin dudas! Los mercados y los consumidores actuales la exigen. Los compradores son cada vez son más complejos: quieren saber qué están comiendo, cómo está tratado ese animal, de dónde proviene y hasta qué comió. Nosotros arrancamos por la parte sanitaria, pero prevemos incorporar otras variables.